¿Cómo disfrutar el sexo al máximo?
Artículo escrito para el blog de Ama Fuerte
Vivir bien el sexo en el matrimonio es algo fundamental. El sexo es el culmen de la comunicación y, a la vez, la mejor señal de que las cosas funcionan bien en una pareja. Sin embargo, no puede convertirse en algo maquinal, ni mucho menos en una obligación. Es algo que los dos tenemos que disfrutar, a lo que debemos sacarle el máximo partido. ¿Y tú? ¿Sabes sacarle el máximo partido al sexo?
18 de diciembre de 2021
El sexo físico
Para sacarle el máximo partido al sexo en el matrimonio hay que tener en cuenta los tres planos de la sexualidad. El primero es el plano físico, el sexo físico. Es el más obvio, pero al mismo tiempo es el gran desconocido. Sobre todo porque el cine, la televisión y la sociedad en general nos presentan una imagen de la sexualidad enfocada casi al cien por cien en el apartado físico, y, además, pintan una realidad del sexo muy diferente del día a día de una pareja normal.
Y es que, desde un punto de vista físico, ni el hombre y la mujer tienen los mismos tiempos, ni la atracción tiene las mismas características, ni las ganas normalmente tampoco son las mismas. Ellas dependen mucho más de la faceta anímica y de los ciclos. Los tiempos son más lentos que los del hombre, y, sobre todo, mucho más dependientes del estado actual de cómo está su relación con el otro en ese momento.
Por su parte, el hombre es más lineal, y alcanza tanto la excitación como el orgasmo mucho más rápidamente. Por eso, para sacarle el máximo partido al sexo y disfrutar al máximo de una relación sexual sana, es fundamental cuidar los tiempos y conocer la sexualidad a fondo, para intentar sincronizarse al máximo. Solo así, cuando conocemos muy bien físicamente al otro, sacamos el máximo partido al sexo en el plano físico.
El sexo afectivo
El segundo plano es el de los afectos: el sexo afectivo. Los afectos nos hacen diferentes como seres humanos, porque el sexo no puede convertirse en algo maquinal, meramente físico, solo corporal, sin sentimientos. Desde este punto de vista, todos necesitamos sentirnos queridos afectivamente: unos lo traducirán en sentirse admirados —quizás más ellos que ellas, aunque no tiene por qué serlo siempre—, otros —quizás más ellas, pero puede ser al revés— necesitarán sentirse capaces de atraer.
En cualquiera de los casos, ambos necesitamos sentirnos queridos. En segundo lugar, en cuanto a lo afectivo, queremos también sentir que nos necesitamos el uno al otro. Y, finalmente, el afecto se traduce en el respeto: nos respetamos el uno al otro. Respetamos los gustos que tiene el otro, las caricias que le excitan, las expresiones que le hacen sentirse querido o querida, los momentos que prefiere… Solo si conocemos en profundidad afectivamente al otro sacaremos el máximo partido al sexo en este plano afectivo.
El sexo espiritual
Finalmente, está el plano más humano: el de la inteligencia. El sexo espiritual. En él se demuestra que la entrega por el otro es total y para siempre. Porque intervienen aspectos como la generosidad, que se entrega al máximo sin buscar nada a cambio, o la fidelidad, que busca la exclusividad como base de la felicidad, o la voluntad para la entrega total, que supone autocontrol, porque con ella se controlan los instintos y los afectos —y eso hace que el acto sexual se convierta en un acto exclusivamente humano—.
En este sentido, la inteligencia nos ayuda a sacarle el máximo partido al acto sexual, ese momento especial en el que la capacidad de placer físico, afectivo e intelectual se multiplican y aumentan su capacidad de placer al máximo.
* * *
Para disfrutar al máximo, un consejo final: busca siempre, en cada encuentro sexual, que sea el otro el que disfrute más que tú. Que disfrute más que tú en el plano físico, que disfrute más que tú en el plano afectivo y, finalmente, que disfrute más que tú en el plano intelectual. Y, paradojas de la vida, quien busca que el otro disfrute más, termina disfrutando también más. ¿No crees que vale la pena el esfuerzo?
Fernando Poveda
Si quieres, puede suscribirte a este blog. Te enviaremos un mail cada vez que salga un nuevo post. Así podrás estar al día cómodamente.
En cualquier momento podrás cancelar la suscripción
También puedes leer....
25. Si hay mil formas de decir «te quiero», elige una. Todos las conocemos: hay parejas que no terminan de funcionar. Y lo curioso es que, si hablas en profundidad con ellos, te das cuenta de que se quieren. Se quieren de verdad. Se quieren, pero no consiguen demostrárselo el uno al otro.
24. La mirada de amor. La mirada de amor disculpa. La mirada de amor no juzga. La mirada de amor encuentra una razón positiva que justifica incluso las cosas objetivamente menos buenas. ¿Y tú? ¿Miras a tu pareja con ese cariño? ¿Con qué ojos miras al otro?
23. Cómo elegir pareja. Elegir pareja no es sencillo. Por eso conviene tener en cuenta algunos sencillos consejos que pueden ayudar a elegir pareja. Aquí te presento algunos
22. La importancia del contacto físico. Los expertos hablan de la importancia de los besos, abrazos... ¿Y tú? ¿Das besos? ¿Das abrazos? ¿Derrochas contacto corporal?
21. Lucha por sus sueños. Cuando alguien me pregunta qué consejo rápido daría a alguien para mejorar su relación de pareja yo digo lo mismo que decía John Gottman, el gran gurú de temas de pareja: «Lucha por sus sueños».
20. Las discusiones de pareja. La receta definitiva. Algunos consejos para afrontar una discusión de pareja de forma positiva y constructiva.
19. Discutir por las tareas de la casa. Existen en una relación algunos temas típicos de discusión, como pueden ser el reparto de las tareas de la casa. Y tú, ¿sabes cuál es la mejor manera de repartir las tareas domésticas? A continuación, te presento algunos consejos útiles a la hora de repartirlas.
18. El amor es ciego. El desamor también. El amor es ciego. Pero una ruptura, ¿es una decisión racional?
17. 10 consejos para una crisis de pareja. En el día a día de una pareja es normal que haya pequeñas o grandes discusiones. Y llegan las crisis. Y entonces, ¿cómo hacer? Te propongo 10 sencillos consejos para afrontar una crisis.
16. ¿Cómo disfrutar el sexo al máximo? El sexo no puede convertirse en algo maquinal, ni mucho menos en una obligación. Es algo que los dos tenemos que disfrutar, a lo que debemos sacarle el máximo partido. ¿Y tú? ¿Sabes sacarle el máximo partido al sexo?
15. Domir bien para amar mejor. Qué fácil es querer al otro cuando estás al cien por cien. Cuando tienes las baterías a tope, cuando estás descansado, cuando no tienes estrés, cuando la vida te sonríe y vives feliz.... El problema es que la vida no es así de sencilla.
14. ¿Cómo lograr tu mejor versión? Todos pasamos por buenos y malos momentos, pero de forma habitual hacemos un esfuerzo para poner buena cara y tratar de ser agradables a los demás
13. Del «estoy enamorado» al «ya no siento nada» - ida y vuelta. El amor tiene tres bases sobre las que se asienta: Sentimiento, inteligencia y voluntad.
12. «Cariño, tenemos que hablar». Hay que aprender a usar las palabras para que no hieran, para que nos ayuden a mejorar la relación.
11. «Yo soy así». Decir «Yo soy así» - y quedarse tan tranquilo.
10. Desear Feliz Navidad… y conseguir que realmente sea feliz. Siete consejos prácticos para vivir la felicidad en la pareja
09. A veces el problema no es lo que pensábamos. Las crisis llegan. ¿Sabes dónde está el problema?
08. Hacer el amor muchas veces al día. Los expertos en la vida de pareja recalcan la importancia de hacer el amor para tener una vida de pareja sana.
07. El tiempo compartido, la «poción mágica» de la pareja invencible
06.Una relación estable y feliz. Vale, pero ¿y los niños? Los niños pequeños en la vida de la pareja
05. Te he dicho "te perdono" pero en realidad. Las tres caras del perdón
04. Te busco por todos lados. Profundizar en las necesidades del otro para buscar su felicidad
03. Siente el otoño en tu pareja. La vuelta a la normalidad puede ser un momento para retomar las buenas costumbres de la pareja.
02. El pricipio del curso, el mejor momento para volver a empezar en la relación de pareja
01. Tu libro dedicado. Ahora puedes recibir en casa tu libro firmado y dedicado por el autor